Plan de jubilación: diferencia con plan de pensiones

¿Cuántos artículos hay en este blog sobre los planes de pensiones? No llevamos ni la cuenta ya. Pero es que no queremos que os quede ninguna duda, la jubilación es un momento muy importante como para dejar cabos sueltos o no hablar de todos los productos que os pueden favorecer a la hora de dar ese paso. Hay uno en concreto, el plan de jubilación, del que quizás se hable menos pero que puede ser una muy buena opción para vuestro retiro soñado. Aunque pueda ser un concepto similar al plan de pensiones, existen grandes diferencias entre ambos que debemos destacar.

Como definición, un plan de jubilación es un seguro de vida orientado al ahorro que suele cubrir contingencias de jubilación, invalidez o fallecimiento. Se trata de un producto gestionado por las compañías de seguros.

 ¿En qué se diferencia de un plan de pensiones?

Un plan de jubilación y un plan de pensiones tienen una diferencia principal que radica en su naturaleza, pues el primero de ambos al fin y al cabo es un seguro ofertado por las compañías de seguros, mientras que los planes de pensiones son instrumentos de ahorro colectivo incluido en los fondos de pensiones.

Además de esta diferencia principal, encontramos otras bastante importantes:

• Rescate del dinero: Un plan de jubilación puede cancelarse en cualquier momento, aunque podría conllevar el pago de una comisión en caso de que no se cumplan las condiciones del contrato . En los planes de pensiones, en cambio, ya hemos visto en otros artículos que se tienen que cumplir una serie de requisitos para poder sacarlo antes de la jubilación.
• Fiscalidad: Aunque el fin del producto es el mismo, la jubilación, los dos tienen una fiscalidad muy diferente.
  • Rescate: La fiscalidad del rescate es más favorable para el plan de jubilación, pues solo se pagarán impuestos por los intereses generados.
  • Aportaciones: Por el contrario, la fiscalidad de las aportaciones es mejor en los planes de pensiones, debido a que permiten pagar menos impuestos por las aportaciones que se realizan cada año, pues estas se reducen de la base imponible de IRPF.
• Rentabilidad: La rentabilidad de un plan de jubilación suele ser menor que la de un plan de pensiones. Esto se debe a que el tipo de inversión es diferente:
  • En los planes de pensiones las aportaciones se invierten en los mercados, y su rentabilidad varía dependiendo de la evolución de los activos en los que invierten, del riesgo que se asume, del acierto del gestor, etc. pudiendo cambiar de tipo de inversión en cualquier momento y aprovechar las oportunidades que presentan los mercados optando así a rentabilidades superiores.
  • El seguro de jubilación, es un seguro de vida que tiene una rentabilidad mínima garantizada (mayor o menor dependiendo de los contratos).

Hay un montón de maneras de ahorrar para la jubilación, lo que pasa es que el plan de pensiones es el más común. Pero eso no quiere decir que porque lo conozcáis, sea el que más se adecúe a vuestras necesidades. Por eso es importante que conozcáis todos los productos de ahorro posible y así tengáis la posibilidad de valorar por vuestra cuenta cuál es mejor para vosotros.