CASO PRÁCTICO
28 diciembre 2020 | 5 minutos
A veces se necesita acceder a la pensión antes de la edad legal de jubilación. Sin embargo, hay ciertos condicionantes: no puedes hacerlo cuando quieras, ni como quieras. Todo depende de las circunstancias en las que te encuentres. Por ejemplo, para calcular la jubilación anticipada hay que diferenciar entre la voluntaria y la forzosa, ya que no son exactamente equivalentes. Por eso te traemos el caso de Concha y Antonio.
Concha tenía una floristería y decidió jubilarse antes de tiempo. Por eso, ha estado esperando el 2020 para cumplir 63 años, ya que necesitaba tener mínimo dos años menos de la edad legal de jubilación actual (65) para recibir su pensión. Para conseguirlo, necesitaba acreditar que había cotizado al menos 35 años. Por suerte, ella había cotizado ya 38 años.
Debes saber que a este tipo de jubilación puede optar cualquier trabajador, incluidos los autónomos, como ella.
Desgraciadamente, a Antonio, que trabajaba para una multinacional, lo despidieron a causa de la crisis. Por eso se ha visto obligado a tramitar una jubilación anticipada forzosa.
Este tipo de jubilación se diferencia de la voluntaria en que puede pedirse cuatro años antes de la edad legal de jubilación; es decir, a los 61 años en 2020. Y el requisito para conseguirla es acreditar una cotización de al menos 33 años en la seguridad social. Menos mal que él trabajaba para una empresa porque los autónomos, como Concha, no pueden tramitar esta opción.
Debido a que la edad de jubilación va incrementando hasta llegar a los 67 años en 2027, los años de cotización que habrá que cumplir para conseguir la prejubilación serán cada vez más. De hecho, en el 2027, la edad será a los 63, y a los 65 dependiendo si es forzosa o voluntaria.
Pero no sólo eso, además, hay que tener en cuenta los coeficientes de reducción; es decir, el porcentaje que se recorta por cada trimestre que se anticipe la jubilación. Este porcentaje, es más elevado en el caso de la jubilación voluntaria que en el de la no voluntaria.
Como ella ha decidido jubilarse por voluntad propia debe aplicar el coeficiente reductor en función del periodo cotizado:
Si a ella le corresponde una pensión de 20.000 euros, pero sólo cotizó 38 años y medio, entonces le queda una pensión de 17.000 euros.
En su caso, el coeficiente reductor es menor, pero sigue siendo significativo:
Al igual que Concha, él también tenía una pensión de 20.000 pero se tuvo que prejubilar con 42 años cotizados. Por eso, tiene derecho a recibir 17.400 euros.
No hace falta que te duela la cabeza para calcular tu prejubilación. Por suerte, la Seguridad Social ofrece un simulador de jubilación anticipada con el que puedes estimar tu pensión futura. Además, puedes usar nuestro simulador para saber la cantidad de pensión que te corresponde llegado el momento.
No todo el mundo tiene las mismas necesidades, y queremos que encuentres la solución que mejor se adapte a tu situación.