Vamos con tu futuro
Vamos con tu futuro
06/11/2020 | 4 minutos
Si habéis leído otros artículos de este blog, estaréis al tanto de un montón de temas relativos a la jubilación, algunos de vital interés cuando se acerca ese momento tan importante de nuestra vida y que algunos estamos deseando alcanzar. Uno de estos temas es el correspondiente a las pensiones, que siempre suele estar en el centro de la polémica, pero nosotros venimos obviando eso en nuestros artículos. Lo que nos interesa es que tengáis acceso a toda la información necesaria sobre ellas y evitaros el mayor número de dudas posibles.
Bien, en cuanto a las pensiones, lo que nos interesa en este artículo es todo lo relativo a la pensión contributiva, qué es y qué requisitos son necesarios para acceder a ella. Te lo contamos.
Realmente la pensión contributiva es la que todos conocemos, aquella que ofrece la Seguridad Social. Profundizando un poco en su definición, para no quedarnos cortos, la pensión contributiva es una prestación económica dispensada por la Seguridad Social por estar afiliado a esta y haber cotizado un mínimo de años, una vez se hayan cumplido una serie de requisitos que veremos más adelante. Suele ser de duración indefinida y vitalicia. Hay varios tipos:
Ya hemos visto en otros artículos que hay muchas variantes de este tipo de pensión, pero en general es aquella que se recibe cuando se alcanza una edad establecida por la ley y se han cotizado un periodo mínimo de años.
Destinada a aquellas personas que, por un accidente o por una enfermedad, han visto mermadas sus capacidades para desarrollar su función laboral. Esta se le reconoce al trabajador cuando tras diagnóstico médico o tratamiento, ha sido calificado como inválido.
En este grupo se incluyen las pensiones contributivas que se obtienen por viudedad u orfandad.
“La pensión contributiva es una prestación económica dispensada por la Seguridad Social por estar afiliado a esta y haber cotizado un mínimo de años, una vez se hayan cumplido una serie de requisitos”
Como es lógico, los requisitos para acceder a una pensión contributiva varían en función del tipo al que atendamos:
Para acceder a este tipo de pensión es necesario haber cotizado un mínimo de 15 años a la Seguridad Social y haber cumplido los 65 años y 10 meses. En este caso se accederá al 50% de la base reguladora, que se irá incrementando año a año. Si se quiere obtener el 100% de la base reguladora, tendremos que haber cotizado al menos 37 años y haber cumplido los 65 años. Además, la Seguridad Social contempla una serie de excepciones como la jubilación anticipada, pero eso lo veremos en otros artículos.
El trabajador debe estar dado de alta en la Seguridad Social en el momento de declararse la incapacidad, eso es indispensable. Después, entran una serie de factores como la edad, el grado de invalidez o la causa de esta, que afectan al periodo de cotización.
Los requisitos varían en función de si el motivo es por viudedad, donde influyen factores como el motivo del fallecimiento u orfandad.
Como veis, depende mucho de la situación en la que nos encontremos, pero es verdad que la Seguridad Social cubre casi todos los casos. Una vez cumplidos todos los requisitos, os toca solicitarla rellenando la solicitud en el centro de atención e información de la Seguridad Social que os corresponda. De todas formas, no os preocupéis si se os pasa o no habéis realizado el proceso en las fechas que os tocaban, pues el derecho a la pensión no expira.
No todo el mundo tiene las mismas necesidades, y queremos que encuentres la solución que mejor se adapte a tu situación.
