09/11/2022 | 4 minutos
La desgravación del plan de pensiones es una ventaja que muchos ya conocen. Si te encuentras entre ellos, sabrás de sobra que el diferimiento fiscal que tiene este producto es un excelente método de ahorro. Sin embargo, su rentabilidad puede aumentar aún más si, como aconseja Inverco, se reinvierte el ahorro fiscal que genera el plan anualmente. Vamos a verlo con más detalle.
Para entender bien lo que señala Inverco hay que comenzar por comprender cómo funciona un plan de este tipo.
El plan de pensiones es un producto financiero en el que el titular va realizando aportaciones que disfrutará en su jubilación. Esto sirve como complemento a la pensión de la Seguridad Social, pero tiene más ventajas.
Si el hecho de contar con esta suma ya es atractivo de por sí, hay otras características que son de lo más provechosas. La desgravación del plan de pensiones es una de ellas. El dinero que se invierte en el plan repercute beneficiosamente en la declaración de la renta, ya que las aportaciones realizadas reducen la base imponible del IRPF.
De este modo, es fácil entender que invertir en el plan reduce el pago o aumenta la devolución de la renta anual.
Lo que indica Inverco es que ese ahorro en la declaración se debería reinvertir en el plan. Así, además de las aportaciones que realices periódicamente, podrás tener una extra que será fruto precisamente de las ventajas fiscales que tienen los planes de pensiones. Después te mostraremos una simulación para que veas lo interesante que puede llegar a ser esto, pero antes hay que hablar de otras características del producto.
Para entender bien de qué se habla cuando se trata de planes de pensiones, es preciso atender tanto a la legislación como a otros aspectos. Las aportaciones realizadas al plan desgravan en la renta, y se difiere así el pago de impuestos al momento en el que se rescata el plan.
Este diferimiento fiscal es interesante. Normalmente, el plan se cobrará cuando ya estés jubilado, por lo que los tipos de IRPF que tendrás que pagar serán mucho más bajos que los que habrías abonado durante tu vida activa. De esta forma, se consigue ahorrar a largo plazo.
Tampoco hay que perder de vista la rentabilidad del producto. El dinero que se aporta en el plan está sujeto a la rentabilidad que genere y que se va acumulando con el tiempo. La cifra puede variar en función del tipo de plan, aunque Inverco señala que la media española está en una rentabilidad anual del 3 %. La cifra no debe tomarse a la ligera, dado que es un extra que te encontrarás cuando decidas retirar tus ingresos en la jubilación.
Lo que nos ha traído hasta aquí es comentarte el consejo que ya apuntamos antes: reinvertir en el plan sus propios beneficios fiscales. Es decir, si cuando llegue la declaración de la renta tienes que pagar menos o te devuelven una determinada cantidad gracias a tu plan de pensiones, harías bien en aportar esta cantidad al plan para incrementar más la rentabilidad del producto.
Vamos a ver un ejemplo. En este, un trabajador aporta a su plan de pensiones una cantidad fija de 1.000 euros anuales con la rentabilidad media del 3 % que antes hemos explicado. Con un periodo de acumulación de 20 años, finalmente el empleado del que hablamos se encontrará con 26.870 euros.
Esta cifra es la mínima y se puede multiplicar reinvirtiendo los descuentos fiscales obtenidos por el simple hecho de contar con el plan de pensiones. ¿Cuánto? Pues un 40 % exactamente. De esta manera, el trabajador con el que estamos ejemplificando vería en su plan una cifra de 37.326 euros por el simple hecho de haber reinvertido en el plan los beneficios fiscales.
Estamos hablando de una diferencia de más de 10.000 euros solo por aportar al plan los beneficios fiscales que el propio plan nos da. Esta es una forma muy sencilla de aumentar su rentabilidad. De esta forma, lo que Inverco dice es que se aproveche la situación en lugar de dejar pasar este dinero que o no hay que pagar a Hacienda o bien esta nos lo devuelve.
En definitiva, está claro que reinvertir la desgravación del plan de pensiones es algo que está lleno de ventajas. Conseguir una rentabilidad un 40 % mayor a largo plazo hace aún más atractivo a este producto financiero pensado para vivir la jubilación perfecta en todos los sentidos.
No todo el mundo tiene las mismas necesidades, y queremos que encuentres la solución que mejor se adapte a tu situación.